“Para ellos es como un juego, tratar de robarse una moto”
A cuatro meses del primer robo que sufrió este año en su local de avenida San Martín 1315, en la madrugada de ayer, dos menores de 14 volvieron a intentar llevarse una moto en el comercio de Esteban Pereyra.
En esta oportunidad, fue a la 3.40 de la madrugada, cuando luego de arrojar un elemento contundente contra la puerta de vidrio, activaron la alarma y eso los puso en fuga.
“Van sabiendo que los buscan, van y hacen exactamente lo mismo. En la misma vidriera”, le dijo el propietario de Flying Motos, Esteban Pereyra, a LA VOZ DEL PUEBLO.
Según el empresario tresarroyense, las autoridades le dijeron que están completamente atados de pies y manos a raíz de la edad de los delicuentes, “ellos te pueden robar cinco, seis, siete u ocho veces. Han robado más de 14 motos pero no les pueden hacer nada. Es muy loco entenderlo, pero para que te des una idea, yo le pregunté a la policía ‘entonces ¿cuàntos robos pueden hacer? ¿Mil? Y me dicen ‘no podemos hacer nada’. Tardan más en hacer el papeleo que recuperar la libertad ellos (por los menores)”, comentó el damnificado quien, luego de sufrir una sutracción el pasado 7 de abril, logró recuperar por sus propios medios la moto robada.
En ese sentido, la víctima decartó que sea un ajuste de cuentas, ”para ellos es como un juego. Van y tratar de robarse una moto, como un desafío”, concluyó.
El pasado domingo 7 de abril, dos delincuentes encapuchados se llevaron una moto de 200cc que estaba en exhibición luego de romper una puerta que da al frente, sobre avenida San Martín. Tras eso, con celeridad pero mucha calma, lograron sacar el vehículo del local, trasladarlo corriendo hasta la esquina, donde lo habrían arrancado.
En el hecho más reciente, trataron de destruir el vidrio con un objeto contundente, pero las características del material lo impidieron y activaron la alarma, lo que puso en fuga a los precoces delincuentes.