Muñoz de Quilmes tras el clásico: “Pudimos salir adelante jugando mucho más en equipo”
Si se armara un podio o terna de los jugadores más valiosos o importantes de la competencia de la ATB, difícilmente Nicolás Muñoz quede fuera de esa elección. El zurdo alero es un poco la piedra basal donde Quilmes construye su juego y los grandes triunfos, como lo fue hace poco la obtención del Torneo Apertura.
Y apuntando a resultados importantes pero más inmediatos, el Cervecero viene de ganarle nuevamente hace escasas horas a su clásico rival, Huracán, como visitante, donde Muñoz fue el goleador y la gran figura del juego.
Después de un medido festejo (tal como es habitual en él) y en medio de tanta euforia quilmeña, el Nº9 del campeón aceptó la nota con su hijo Camilo, en brazos; ante la primera pregunta referida a si habían encontrado la fórmula para vencer al Globo, dijo: “Sabíamos que iba a ser un partido muy difícil, no contábamos con Manuel Perticarari que es nuestro líder; permitime mandar condolencias a él y toda su familia (por el fallecimiento de su abuela María Teresa Galván de Elgart)… Volviendo al partido, hicimos un gran planteo y jugamos sin demasiadas presiones sabiendo que podía ser para cualquiera, que podíamos ganar de visitante. Ellos propusieron un juego más friccionado, se tiró mucho más que en otros partidos, y ahí nosotros la embocamos un poco más”, admitió.
Haber dejado al Globo sólo con 48 puntos en 3 cuartos, reafirma una gran defensa y refleja un cambio en el equipo de Ipucha en este aspecto con respecto a los dos partidos anteriores. “Estábamos en un momento donde haber salido campeones nos había relajado un poco; eso no tendría que haber pasado y por eso estamos trabajando verdaderamente muy duro con todos los chicos. La clave era defender a un equipo completo como Huracán, y donde nosotros estábamos un poco cortos sin Mariano (Alvarez) y Perticarari. Y sin faltarle el respeto a nadie, que haya caído el clásico ahora nos vino bárbaro; lo necesitábamos, sabíamos que por estas falencias debíamos trabajar el doble para no sufrir. Asimismo, éramos conscientes que había que tomar decisiones importantes, que varios chicos iban a tener más minutos que los habituales, y por suerte nos representaron muy bien, se pusieron la camiseta en los hombros y pudimos salir adelante jugando mucho más en equipo que en otros partidos”, valoró.
Que su primer triple, de los 4 anotados por él, haya llegado en el primer intento trajo consigo una gran confianza; esta fue una vía bien trabajada por Quilmes y sumamente importante que le reportó 33 puntos. “Siempre que entre el primer tiro ayuda mucho en la confianza; y si uno la está metiendo el equipo se respalda en ello y se suma a ese presente positivo porque ayuda mucho a la cabeza, a disfrutar del partido y de lo que se hace”, confesó.
Quilmes fue el dominador claro de los 30 primeros, pero en el último cuarto necesitó de 4 minutos para anotar, lapso en el que el rival se le vino de 17 a 4 puntos. “Después de un tercer cuarto muy cambiante y con tiros rápidos, nos quedamos un poco sin piernas y tuvimos esa falencia, sobre lo que debemos trabajar para que no se repita”. Pero así y todo, nada lo llevó a dudar sobre el triunfo. “Después de haber jugado tantos años al básquet, uno sabe que en 5 minutos pueden pasar mil cosas; pero estábamos tranquilos, no ví caras de preocupación pero sí de ocupación para revertirlo, tomando mejores decisiones”, analizó.
Y cuando entró ese doble de Pérez Vásquez el alivió generalizado revitalizó al equipo. “Es así, nos propusimos ser inteligentes en el cierre, asentamos la función en los rebotes y los libres, que veníamos errando mucho. La parte final fue muy linda, a todos nos gustan momentos así (de clásico puro desde la emoción y lucha bien entendida), porque te ayudan también en la vida donde muchas veces estas con presiones y presiones, y no sabes cómo resolverlo. En el partido es parecido, y queda demostrado que se puede salir adelante; y haberle regalado un buen partido y un lindo espectáculo a toda la gente que siempre alienta a su equipo, nos reconforta plenamente”, confesó.
Sin dudas este triunfo ayudará a Quilmes a mirar de otra manera este Clausura y los futuros playoffs. “Seguro nos dará confianza y nos tranquilizará bastante para seguir el camino trazado” reconoció la figura del clásico, quien ante esta afirmación sólo tuvo palabras de agradecimiento “para mis compañeros, porque esto es un equipo; uno, en solitario, nada puede hacer”.