Huracán aspira al liderazgo
Tras vencer a Once Corazones y con un partido pendiente, el Globo podrá subirse a la cima en caso vencer a Claromecó
Huracán no necesitó desplegar su máxima expresión futbolística para ganarle 2-0 con amplitud y comodidad a un deslucido Once Corazones; además, con su victoria y algún resultado ajeno, el Globo quedó con la posibilidad de depender de sí mismo (si le gana a Claromecó el partido postergado que pierde 1-0 al término del primer tiempo) para dar el salto a la cima del Torneo Apertura.
Dos goles de Juan Marchetti, ambos en el primer tiempo, fueron la rubrica que selló el merecido resultado de un partido, como la tarde, gris y frío; y que a 10 minutos del final recibió esa leve lluvia que “promovió” la anticipada retirada de una leve porción del no mucho público que se hizo presente en el Bottino.
El partido transitó casi siempre por el camino que el equipo de Leonardo Gómez diagramó; de movida se apoderó del balón y con su intención de mirar para adelante se vistió de protagonista, aunque hasta el gol no llegó a generar situaciones de peligro. Y la apertura del marcador llegó a los 11’ tras un córner donde Marchetti ganó anticipándose, pero en el trayecto un compañero en offside tuvo participación activa al ir a buscar la pelota, lo cual envolvió de muchas dudas la valides de gol.
Por méritos no estaba mal el 1-0, aunque en los 5’ siguientes los de Indio Rico desnudaron ciertas dudas y desacoples defensivos del Globo, pero primero el centro de Axel Prieto no pudo ser definido por Rivera ni Julián Prieto, y 5’ después el propio Rivera cabeceó suave para un seguro Del Río. Ese fue el momento de la visita que seguidamente entró en cierto descontrol, muchos yerros y por los laterales ofreció dos sectores fáciles para atacar, dado lo endeble que se mostraron Gómez y Fauquen. Y por el lado de Gómez llegó a los 38’ el segundo gol: gran pase de Domínguez a Uzidinger, preciso centro-pase de éste para un Marchetti que con alma de goleador encaró y definió fuerte y rasante.
El complemento le quedó “largo” a un Once Corazones, que pese a los cambios de nombres o tácticos poco generó porque el nivel individual de varios de sus elementos quedó lejos de un Huracán que sin alcanzar su mejor actuación fue sólido, tuvo en Domínguez a su “motorcito” del mediocampo junto a Ciccioli (quien Alberca le ahogó a tres metros el grito de gol a los 39’), y cuando Barroca se conectó (algo que el equipo necesita y mucho), el Globo potenció ese volumen de juego que puede y debe tener para aspirar a ser el puntero del torneo.