El Museo Histórico de Orense cumplió 18 años
Un tiempo atrás, la Asociación de Fomento reunió a vecinos para que dieran su apoyo a la idea de contar con un espacio para tal fin y el 24 de agosto de 2007, el sueño se hizo realidad. Un repaso breve por un lugar con identidad y sentido de pertenencia dentro del distrito que en la actualidad sigue creciendo con materiales que aporta la comunidad
Bajo el lema “La historia de un pueblo no es solo lo que un pueblo ha vivido, sino lo que ese pueblo recuerda y como lo recuerda”, nació la idea de crear un Museo Histórico para cuidar y honrar el acervo histórico y cultural de Orense.
Por tal motivo, la Asociación de Fomento reunió a vecinos para que dieran su apoyo a la idea de contar con un espacio de esas características y con gran entusiasmo, el 24 de agosto de 2007 ese sueño se hizo realidad con la colaboración de las autoridades municipales de aquel entonces. De modo tal que, a fines del mes pasado, el Museo Histórico de Orense llegó a su 18° aniversario.
Hace ya 18 años, en ese rincón del pueblo vive la historia y día a día crece el material resguardado que recuerda que la localidad tiene más de 100 años vividos.
La historia da cuenta que el Museo Histórico tuvo su primera sede en la planta alta de la delegación municipal y cuando llegó el centenario de la localidad, se trasladó a la casona actual ubicada sobre Av. San Martín 443. En tanto que el 7 de noviembre de 2013, el Centro Cultural inició ahí sus actividades en ese espacio para favorecer a la cultura del pueblo. De ahí radica el nombre unificado que lleva hoy: Centro Cultural y Museo Histórico de Orense.
“Preservar nuestra historia”
Para referirse a este nuevo aniversario, La Voz del Pueblo contactó telefónicamente a Ana Kergardt, una de las mujeres que forma parte de la comisión de amigos del Centro Cultural y Museo Histórico de Orense.
En primer lugar, destacó que “en estos 18 años, es mucha la gente que ha trabajado y participado con sus relatos acercando valiosas donaciones, trayendo materiales históricos, cuidando el lugar y atendiendo al público. A 18 años de su fundación, nuestro querido museo sigue escribiendo y recibiendo información. Gracias a todos por el apoyo, el aporte y por entender lo valioso que es preservar nuestra historia”.
Hizo referencia a cómo fueron los primeros pasos y agregó que “fue en 2006 cuando empezamos a pensar que no estábamos guardando nuestra historia. Sabemos que muchas personas conservan recuerdos relacionados con el pueblo y con la vida propia de Orense, fuimos recolectando datos e información de a poco, guardando esos testimonios orales y escritos como un tesoro. Con ese material, pudimos hacer un total de tres libros sobre la historia de Orense”.
Sobre las dependencias con las que cuenta la casona antigua, pero refaccionada en donde hoy funciona el Centro Cultural y Museo Histórico de Orense, dijo que “tenemos una sala en donde está el museo propiamente dicho, en otra hay un archivo y en otras dos salas se hacen las actividades culturales. El Centro Cultural nace en el 2013 con el centenario del pueblo”.
Para este cumpleaños número 18, contó que “hicimos una convocatoria abierta a todos los vecinos para que nos enviaran fotos, anécdotas y objetos para ir renovando el archivo. Además, el sábado se hizo un té que se llamó entre masas y tazas que tuvo la participación de Valeria D´anunzzio y Raquel Haritcalde. Allí se compartió una tarde de aprendizaje y diversión en donde Raquel hizo una tarta merengada de manzanas y Valeria compartió sus conocimientos sobre la etiqueta de la mesa de té”.
Una línea de tiempo
Sobre esta iniciativa, adelantó que “tenemos un grupo de investigación que está haciendo una línea de tiempo que va contando la historia de Orense año por año con fotos. Estamos reviendo los orígenes del pueblo, haciendo una cartilla que vamos a pasar luego por las escuelas para que esté a disposición de estudiantes y docentes sobre los orígenes del pueblo”.
En ese sentido, dio a conocer que “también hacemos la historia del Balneario Orense porque hemos conseguido fotos y otras cosas. Todo material lo vamos guardando, las escuelas vienen a consultar el archivo cuando van a alguna feria o trabajan un tema en clase vinculado al tren. Vemos que es algo útil lo que hacemos a diario”.
Antes del cierre, Ana Kergardt reflexionó que estos 18 años “nos sirvieron de gran experiencia. En un principio no sabíamos muy bien lo que era un museo, tuvimos mucha ayuda de vecinos y autoridades para contar con lo que hoy tenemos. Es una tarea hermosa, interesante y valiosa la que desarrollamos porque vamos dejando registros de qué fue el pueblo y de cómo llegamos hasta acá, lo cual es muy satisfactorio para los que trabajamos en este proyecto”.
Lo cierto es que el Centro Cultural y Museo Histórico de Orense seguirá apostando a la concreción de nuevos proyectos de utilidad para la educación, la cultura y la vida social de toda la comunidad.