El aumento de tasas y ¿el “vuelto” del Vecinalismo?
Por Enrique Mendiberri
La inmediata respuesta del oficialismo a la aprobación por mayoría en el Concejo de un aumento del 33 por ciento en las tasas municipales estuvo a la altura de las batallas que el kirchnerismo libra cada día con el Gobierno Nacional en su objetivo por bajar el déficit fiscal.
De todas las políticas que se podrían revisar para administrar los recursos municipales y adecuarlos a los ingresos que se vienen con una tasa acorde al índice de la inflación, se eligió la que mejor está funcionando y la más sensible a las necesidades de los tresarroyenses: la salud pública y, en ese contexto, la guardia pedíatrica. Justamente una de las banderas que le hizo ganar Tres Arroyos al intendente Pablo Garate y uno de los compromisos que más rápido solucionó, hoy es moneda de cambio en una discusión política.
¿Pero qué fue lo que llevó a semejante extremo a menos de 10 meses de Gobierno?
En la vereda de enfrente, se tejen teorías. Entre ellas, el hartazgo del Vecinalismo de ser la causa de todos los males económicos que enfrenta el municipio y, por ello, el primero en abandonar el acompañamiento con el que contaba UxP después de despachar por minoría una propuesta de aumento del 85%.
Esa especie de “bullying político” que estaba sufriendo el partido que gobernó hasta diciembre pasado, se tradujo en la conformación de un bloque opositor que, si el oficialismo no atempera su diálogo, puede llevarlo a un terreno pantanoso a la hora de imponer un plan de gobierno que, desde otros sectores, aseguran que se basa en el gasto representado por el incremento de una cantidad de personal que ya estaría duplicando la cantidad de empleados que había en los años que Carlos Aprile logró la normalización de las cuentas públicas de nuestra patria chica.
Transparencia
Un aspecto que no dejó de llamar la atención en la respuesta que un sector de la oposición hizo con respecto a la presión sobre la guardia pediátrica surgida tras la aprobación del 33% de aumento en las tasas, fue la denuncia de escasa transparencia que significa el supuesto bloqueo a los datos del programa de Reforma de Administración Financiera en el Ámbito Municipal (RAFAM). Una página web donde los contribuyentes pueden consultar los detalles del gasto previsto por cada municipio de manera semestral y donde, a pesar de las denuncias de JxC, Tres Arroyos figura con la máxima calificación (100 puntos), de acuerdo a la publicación más reciente efectuada por la ASAP (Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública). Algo no funciona bien.
Pero si de transparencia se trata, hay cosas con las que también nos encontramos en el día a día.
Por ejemplo, del cambio de Subsecretario de Obras Públicas, nos enteramos cuando fuimos a buscar al ingeniero Ricardo Carbajo para que nos explique las razones de una fuga de gas que el lunes pasado aterrorizó por casi una hora a los vecinos de las calles Almirante Brown y San Lorenzo, pero no estaba.
Así, nos terminamos desayunando que hace más de dos meses Carbajo dejó la titularidad del área a la que había sido designado (ojo no fue el séptimo renunciante de la gestión, sino que pasó a otro sector de la cartera) y en su lugar ingresó el avellanedense Javier Doval. Según fuentes de la administración, un viejo conocido del intendente que aceptó el reto de prometer que no se iba a repetir una fuga de gas, a pesar de que, paralelamente, reconoció que los planos del área subterránea no son tan fieles a la real ubicación de los distintos caños que transitan por ahí abajo.
Un alivio
Un poder que podrá empezar a mejorar la calidad de su servicio es el Judicial. Es que el miércoles el Senado bonaerense aprobó los pliegos de nombramiento de las doctoras María Florencia Piro y Agustina Cedeira. La primera, nativa de Bahía Blanca, sumará un juez más al Tribunal de Trabajo, que a raíz de la falta de magistrados, había llegado a postergar audiencias de juicio en los últimos meses, mientras que Cedeira, hará lo propio en la vacante que dejó el doctor Carlos Mazzini al acogerse a los beneficios de la jubilación. No obstante, en el fuero penal, la coordinación con magistrados bahienses, de manera presencial o via zoom, permitió el cumplimiento de los distintos compromisos y su normal funcionamiento no llegó a cristalizarse en audiencias postergadas.
Sin apartarse del fuero penal de Justicia, ya es casi un hecho que el fiscal Carlos Facundo Lemble se sumará a la nómina de investigadores que no volverá al edificio de Lavalle y Moreno.
Según se comenta en los pasillos de la Justicia local, el fiscal que le supo arruinar los planes de seguridad a Carlos Sánchez hace 20 años investigando a sus jefes policiales en distintos casos de corrupción y apremios, pero que en la actualidad forma parte de una escandalosa investigación Federal, hoy ya no volvería a la UFIJ N°13 a raíz de una cuestión de salud que motivó la repetida solicitud de licencias médicas.
De esta manera, su Fiscalía seguirá manos de la doctora Natalia Ramos como subrogante, quien al igual que Gabriel Lopazzo, deberá conducir los destinos de las causas que caigan en una competencia extra.
La ausencia de Lemble fue recordada indirectamente en el esperado juicio a los sospechosos mayores de edad del trágico incendio en el barrio La Aceitera, donde la también fiscal de Género tomó las riendas de una investigación que, originalmente era de Lemble, enfrentando el riesgo de severas críticas a la tarea judicial, ante la posibilidad de estar ante un caso con resultado de muerte sin esclarecer.
Sin embargo, el veredicto de culpabilidad que dio el Jurado popular, no sólo regó con esperanza el espíritu de la sociedad en materia jurídica, sino que le dio un fuerte espaldarazo a la carrera de la fiscal.
Para comentar, debés estar registradoPor favor, iniciá sesión