Caso Baliña: el abogado de los policías presos dijo que la causa es “una locura”
Los policías detenidos con prisión preventiva en dos cárceles bonaerenses a raíz de la denuncia y posterior intervención del empresario tresarroyense Carlos Baliña cuando supuestamente planeaban cobrarle una coima para aliviarle su situación judicial en distintas causas federales, aguardan que en los próximos día el juez Gabriel Di Giulio resuelva un pedido de nulidad planteado por su abogado defensor que, eventualmente, les permita recuperar la libertad.
Al mismo tiempo, trascendió que el Juzgado Federal N°3 de Azul, del que Di Giulio es titular, inició de oficio una causa paralela por “lesiones y abuso de armas” contra Baliña y tres personas allegadas a él, luego de observar los videos de las cámaras de seguridad de la estación de servicio YPF de nuestra ciudad, en donde se dio el episodio en la tarde del pasado sábado 27 de abril.
“La situación es la misma que desde el primer día y el procesamiento (de los policías) está apelado. Después que (los policías) declararon y el juez Federal visualizó los videos de la YPF, abrió una causa contra Baliña y los amigos que lo fueron ayudar. Estaban armados, con armas de fuego, por lo que se abrió una causa por ‘lesiones y abuso de armas’”, dijo a LA VOZ DEL PUEBLO el abogado Maximiliano Orsini, representante legal de los policías Federales Luciano Esteban Penisi y Nicolás Alan Santillán.
Según planteó Orsini ante la Justicia Federal de Azul, los acompañantes de Baliña en la tarde del sábado 27 de abril, están identificados, “son tres personas más, entre ellos un policía, que no recuerdo si estaba en funciones, y unas personas de Mar del Plata. En realidad, ellos proceden a la aprehensión e incluso secuestran teléfonos celulares que después Baliña lleva a las 9 de la noche. Es decir, los secuestran (a los teléfonos) a las 6 de la tarde y (Baliña) los lleva a las nueve de la noche. Una locura realmente, porque se arrogaron una función judicial que no se pueden arrogar”, expresó Orsini haciendo alusión al principal argumento de la nulidad planteada; una teoría que, en caso de ser aceptada por el juez, derrumbaría las razones por las que los uniformados de las fuerzas federales ya llevan cuatro meses presos con prisión preventiva, “todavía no se resolvió esa nulidad. Hay que ver qué opina la Justicia”, dijo el abogado, quien además adelantó que tiene decidido apelar en la Cámara marplatense un eventual rechazo a esa nulidad.
“Tareas de inteligencia”
Al ser consultado sobre la versión de sus defendidos con respecto a la imputación del pedido de coima que pesa en su contra, Orsini dijo los policías negaron todo ante el juez y que, al momento de ser retenidos por Baliña y su gente, estaban realizando tareas de inteligencia relacionadas con una investigación impulsada por el Juzgado Federal de Necochea en el marco de una causa por tráfico de drogas y lavado de dinero, “ellos (por Penisi y Santillán) niegan desde un primer momento haber ido a cobrar una coima. Ellos estaban haciendo un trabajo de inteligencia. La realidad es que acá hay una causa subyacente en el Juzgado de Necochea contra Baliña y el objetivo era justamente voltear esa causa”. En ese sentido, Orsini no descartó la posibilidad de que la semana próxima haya una resolución judicial que le permita recuperar la libertad a sus clientes, “podrían recuperar la libertad, esperemos que así sea, porque ya está todo planteado”, dijo y agregó: “cuando ellos recuperen la libertad van a dar más información y se van a presentar en la causa como querellantes también”.
Tarjetas robadas
En forma paralela al escándalo al que hace referencia Orsini, también fue denunciado el robo y posterior uso de las tarjetas de crédito de uno de los policías que representa en la tarde del 27 de abril.
“Los teléfonos se los lleva Baliña y le robaron la documentación a uno de los policías, al que más le pegaron. Al que estaba en el baño, le robaron y empezaron a hacer compras con su tarjeta de crédito. Hubo que bloquearlas. La documentación, entre ellas la credencial de policía, y las tarjetas, no se las devolvieron”, comentó, antes de informar que las compras fueron hechas más de dos meses más tarde, durante el mes de junio.
El escándalo que culminó con los dos policías Federales presos con prisión preventiva en la tarde del pasado sábado 27 de abril, en la estación de servicio YPF que se encuentra ubicada en la intersección de la ruta nacional N°3 y la calle Vélez Sarsfield de nuestra ciudad, se desató cuando el empresario tresarroyense, Carlos Baliña, junto a unos allegados, procedió a retener a dos uniformados encubiertos a quienes, previamente ante el fiscal Carlos Lemble, había denunciado como los responsables de intentar cobrarle un soborno para desligarlo de una investigación federal de la que es objeto, justamente, junto al citado representante del Ministerio Público.
Precisamente, esa investigación, que es impulsada por el Juzgado Federal de Necochea, a cargo del doctor Bernardo Bibel, se inició a raíz de una denuncia realizada en 2017 por parte de un ex convicto que aseguraba conocer la existencia de negocios vinculados al tráfico de estupefacientes en nuestra ciudad.
Tal como el propio Baliña le dijo oportunamente a este diario, ante la supuesta inacción de la policía frente a la denuncia en la que sostenía ser víctima de un pedido de coima, decidió reunir a un grupo de allegados, simular una aceptación de las condiciones irregulares y, en ese contexto, proceder a la retención de los Federales, hasta el arribo de la policía.
Desde esa tarde, hasta estos días, ambos sospechosos permanecen detenidos con prisión preventiva y no trascendieron oficialmente detalles de la investigación que supuestamente estaban realizando al momento de los incidentes.