30|09|23 20:28 hs.
Empleados del sector afirman que constantemente sufren amenazas, insultos e invitaciones a pelear en CAPS y en el hospital municipal, donde no tienen seguridad pública ni privada
El jueves reciente aproximadamente a las 10:15, en la unidad sanitaria municipal del barrio Ranchos de la Virgen de Luján, una madre que llevó a su pequeña hija para que la atiendan por una alergia, terminó alterándose y generando un intenso momento entre los presentes mientras agraviaba al personal sanitario.
La Voz del Pueblo pudo saber que la mujer exigía que su hija sea atendida por una determinada médica que se encontraba asistiendo a un paciente, y que tenía a cuatro más en lista de espera.
Ante la insistencia de la madre por la atención de su hija, únicamente con esa profesional, se le comunicó que llegaría un médico más que se ocuparía de la atención de la niña.
Pero la mujer se habría rehusado y a partir de su insistencia habría comenzado a gritar, insultar y hasta a amenazar al personal de salud, mientras arrojaba papeles y todo elemento que tenía a mano.
El tenso momento vivido por todo el personal de la ‘salita’ de Ranchos motivó que desde organismos sindicales como la CICOP local (la Asociación de Profesionales del Hospital Pirovano) emitieran un comunicado repudiando los hechos de violencia sufridos que no son aislados.
Fuentes sanitarias confiaron a este diario que la situación del jueves, lamentablemente se repite en muchas ocasiones en cualquiera de los Centros de Atención Primaria de la Salud y especialmente en el hospital municipal Dr. Ignacio Pirovano.
Esos hecho se expresan a través de “amenazas, insultos e invitaciones a pelear”, al margen de hechos que llegaron hasta la violencia física y que oportunamente fueron dados a conocer, mientras los trabajadores de la salud no cuentan con servicios de seguridad pública ni privada, que los proteja tanto a ellos como a los usuarios del sistema de la salud pública local.
Una reacción
Desde la Asociación de Profesionales del Hospital Pirovano se emitió un comunicado donde expresa su repudio en relación a hechos de violencia ocurridos en el CAPS del barrio Ranchos sufridos por el personal de salud que allí se desempeña.
“En días pasados se han suscitado hechos de violencia en dependencias municipales de salud en los cuales han sido agredidos profesionales pertenecientes a esta asociación junto a otro personal de salud municipal.
El trabajo de los profesionales de salud es a menudo ejercido en ámbitos de estrés constante y muchas veces con recursos humanos y materiales limitados, y en cada caso se trata de resolver todas las situaciones con el mayor profesionalismo, con vocación de servicio y mucho sacrificio personal.
Por esto cualquier acto de violencia ejercido contra estos profesionales debe ser repudiado, ya que nunca será herramienta válida para la resolución de ningún tipo de conflicto y consideramos que ninguno de los trabajadores de la salud es merecedor de ese tipo de trato. Ya se han iniciado las actuaciones correspondientes frente a la justicia y a las autoridades municipales para que esta situación no se repita y se proteja a los profesionales involucrados.
Desde la asociación brindamos nuestro apoyo a los profesionales agredidos y seguiremos el tema para plantear los reclamos que sean necesarios para que la situación no se repita. Llamamos a la sociedad de Tres Arroyos a repudiar estos hechos y acompañar el trabajo del personal de salud en su conjunto".