El atletismo “es muy hermoso, muy lindo”, describió (Foto: Emanuel Fredes)

Deportes

Federico Cabello y su vinculación con el atletismo

Trabaja de recolector, corre un maratón diario y ganó en Claromecó

05|02|23 10:34 hs.

El sábado pasado en Claromecó un joven atleta sorprendió con su triunfo, Federico Cabello. Pero para quienes lo conocen la victoria no fue una casualidad, porque con 27 años es el tercer podio en cuatro carreras a pesar de su duro, pero también favorable, trabajo.


Federico es recolector de residuos de la empresa Transporte Malvinas, todos los días recorre 420 cuadras (42 kilómetros) y a eso le suma los trabajos de entrenamientos de atletismo que le propone su entrenador Ulises Sanguinetti.

Para conocer más de su historia, que cuente sus sensaciones del triunfo y saber sus objetivos, el joven estuvo en La Voz del Pueblo y detalló: “Arranqué a entrenar en mayo del año pasado por mi tío, Santiago Landriel, que corre acá (en la Escuela Municipal). Yo lo acompañaba en bicicleta y se me dio por decirle 'quiero intentarlo' y me alentó para probar, le preguntó a Uli (Sanguinetti) si me podía llevar a la pista y ahí arranqué despacito, con muchas ganas".

Su primera prueba fue al mes de comenzar a entrenar, en la competencia de la Escuela 12 y fue con un podio. “Salí tercero en la general”, recordó, y luego nuevamente dos buenos resultados: “En la de Juárez salí segundo en la general y después viajé a la de Tinelli en Bolívar y terminé entre los 20 primeros, fue el primer tresarroyense. Recontento”.

Pero todavía le faltaba el triunfo, conocer el sabor de la victoria, y el esfuerzo le regaló el premio de la medalla con el “1”. "El primer triunfo fue el de Claromecó. No lo podía creer, una alegría que no sabía qué hacer, fue muy lindo. Fueron tremendas las bajas y subidas de la arena, las piernas no te daban más. Pero fue muy lindo, el circuito estaba muy bueno, costó pero salió. Muy contento".


Federico Cabello con sus medallas (Foto: Emanuel Fredes)


Parte de la carrera le tocó hacerla con Diego Maureli, que era uno de los candidatos al triunfo y terminó segundo. “Pegamos la vuelta al Faro y ahí me empezó a llamar que me ponga cerquita, nos pusimos a la par, y él después pisó un pozo y se torció el tobillo, lo alenté para que vaya pero no podía, seguí yo y pude salir primero. Fue tremendo estar con él al lado y alentarlo para correr fue hermoso, muy buen compañero", remarcó.

A Claromecó Cabello llegó “con un compañero de Los Correcaminos (Diego Garrido) que le agradezco de corazón que me haya llevado porque no tenía nada en qué ir, y que haya compartido cosas conmigo también", valoró.

Trabajar y entrenar
 
Para Federico correr es normal, ya que es recolector de residuos y todos los días va en la parte de atrás del camión al trote, subiendo y bajando, para limpiar la ciudad. “Corremos 420 cuadras todos los días”, afirmó con naturalidad, y justificó: “El otro día puse el GPS para ver cuánto hacíamos, 42 kilómetros marca que hacemos”.

Al principio le costó adaptarse al duro trabajo y el entrenamiento, pero cuando se acostumbró pudo seguir con el atletismo. "Cuando me pasaron a correr aflojé un poco porque es muy exigente, hasta que me acostumbré y volví a entrenar dos semanas antes de la carrera de Claromecó. Empecé a hacer las pasadas que me daba el profe y salió redondito. Uno le mete gana y el esfuerzo, estaba de noche, me acostaba a las 4 de la mañana y a las 6 iba a entrenar y después me acostaba una siesta, esas dos semanas todos los días. Y el esfuerzo vale la pena para hacer lo que te gusta", valoró.

Más allá que el trabajo lo mantiene entrenado, también le genera complicaciones en su físico como "problemas de rodillas y tobillos, te torces, te golpeas de bajar y subir”. Más allá de eso, reconoció: “Estoy operado de una rodilla, pero quedé re bien. Vengo súper bien con todo. Hay que comprarse siempre unas buenas zapatillas todos los meses o cada dos meses”.

Para la carrera de Claromecó Federico trabajó la noche anterior, y recordó: "Nunca me pedí el día para las carreras. Para la de Claromecó laburé el viernes a la noche, salí a las 4.30 de la mañana, me acosté hasta las 9 y pico que no podía dormir por los nervios, estuve todo el día haciendo cosas y después me fui a Claromecó a correr".

Al futuro

Ahora el joven puede pensar en seguir creciendo, en nuevas carreras y desafíos, pero lo maneja con calma. “Tenía ganas de correr la de La Pampa, la que es maratón y media maratón en abril, vamos a ver qué sucede”, adelantó, aunque tendrá que resolver entrenamientos y cuestiones económicas ya que hoy se solventa a sí mismo.

Cabello en el atletismo encontró que “es muy hermoso, muy lindo. Me gustaría hacer eso, que alguien te abra las puertas y te ayude me gustaría mucho". También destacó el valor de su entrenador Sanguinetti, que dijo: "Ulises es el mejor, él siempre está presente para todo. Agradecido, es muy bueno". Mientras que pensando en nuevas carrera, fue cauto: "Ahora quiero llegar a un poco más de entrenamiento, ver cómo evoluciono y esperar un tiempito".

Mientras que en el final invitó a más gente se sume al atletismo, y también agradeció. "Que se pongan en este deporte que es muy lindo, todo se puede, y es muy hermoso. Si les gusta y ven que se puede que le manden para adelante que es muy lindo. Agradecer a Ulises, a todos los chicos de ahí que están ayudando, a Iván Belén que es el profe del gimnasio y toda mi familia y amigos".