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Un hombre que vivía en Tres Arroyos y hace 10 años se encuentra radicado en Córdoba, donde fabrica muebles para niños, fue denunciado en la Fiscalía de la Mujer de Necochea por tres mujeres familiares de su ex pareja, a las que supuestamente abusó en nuestra ciudad cuando eran menores de edad.
El sujeto, al que por el momento y razones legales este medio se ve obligado a identificar por sus iniciales como R.F.B., tiene 66 años y terminó viviendo en un barrio de la ciudad de Córdoba, luego que una de las recientes denunciantes, lo desenmascaró en una reunión familiar poco después que su nuera dijo que momentos antes también había intentado abusar de ella.
Según Mariana Pasquali, la primera víctima que se animó a denunciar a su tío y padrino, los hechos ocurrieron entre 1987 y 1996. En los primeros seis años, ella fue la víctima y, tras un incidente en el que logró amenazarlo con exponerlo, dejó de atacarla.
Posteriormente, fue su hermana la que pasó por el mismo calvario y ocurrió lo mismo.
“Desde el 1987 a 1993 abusó de mí. Hasta que un día le pegué un grito y nunca más me lo hizo. A mi hermana la abuso hasta el ‘96, es como que a los 10 años te empezás a resistir y él empezaba a dejar de hacerlo”, recordó la mujer oriunda y residente en Necochea, en diálogo con este diario, “el día que me animé a contarlo fue cuando quiso abusar de la pareja de su hijo mayor. Como la chica tenía más de 20 años, lo expuso y, mientras él decía que eran todas mentiras, yo lo expuse también delante de toda la familia. En ese momento, en 2002, mi tía lo dejó y él se fue a Córdoba, donde seguramente siguió con lo mismo”, dijo.
“Desde el 1987 a 1993 abusó de mí. Hasta que un día le pegué un grito y nunca más me lo hizo. A mi hermana la abuso hasta el ‘96, es como que a los 10 años te empezás a resistir y él empezaba a dejar de hacerlo”, recordó la mujer oriunda y residente en Necochea, en diálogo con este diario, “el día que me animé a contarlo fue cuando quiso abusar de la pareja de su hijo mayor. Como la chica tenía más de 20 años, lo expuso y, mientras él decía que eran todas mentiras, yo lo expuse también delante de toda la familia. En ese momento, en 2002, mi tía lo dejó y él se fue a Córdoba, donde seguramente siguió con lo mismo”, dijo.
Al respecto, Mariana asegura que en nuestra ciudad hay más víctimas. Algunas hasta han tomado contacto con ella y se comprometieron a declarar como testigos si es que la causa finalmente llega a juicio, “(la denuncia) la hice más por una necesidad personal que por otra cosa. Además, siempre me quedó dando vueltas que esa gente no se cura, porque no es un enfermo, es un depravado. Con las cosas que nos hizo a nosotros, es obvio que lo sigue haciendo”, aseguró.
Coraje
Según comentó Mariana, una amiga suya en el Poder Judicial necochense le explicó los efectos de la Ley Piazza, la norma que posterga el plazo de prescripción de las causas de abuso sexual a partir de la mayoría de edad de las víctimas, y eso le permitió recuperar las esperanzas de llevar a juicio a su victimario.
El hombre, cuando vivía en Tres Arroyos había sido carpintero y ahora, asegura que forma parte de una feria en el barrio Los Naranjos de la ciudad de Córdoba, donde hace muebles para niños, “el colmo de todo abusador, siempre buscando una excusa para estar cerca de los chicos. Cuando mis primos eran chicos, se la pasaba en la comisión de básquet del club, de la escuela”.
De acuerdo a lo indicado por Mariana, existirían más casos en Tres Arroyos, “porque es un violador serial. Hay otras abusadas que son de Tres Arroyos, hijas de amigos. Niña que tenía cerca, niña que no zafaba”, recordó.
En la actualidad, la causa está radicada en la Fiscalía de la Mujer de Necochea, a cargo de la doctora Mariel Sajet, quien caratuló el expediente como “abuso sexual con acceso carnal”, un delito que, en sus formas más grave, preve penas que oscilan entre los 6 y los 20 años de cárcel.
“Nosotros lo que buscamos viralizando esto es que otras víctimas también se animen a denunciar, para que por lo menos le caiga encima un castigo de la Justicia”, comentó en el cierre.
“Nosotros lo que buscamos viralizando esto es que otras víctimas también se animen a denunciar, para que por lo menos le caiga encima un castigo de la Justicia”, comentó en el cierre.
