21|06|23 11:39 hs.
Ganar ya casi que se había convertido en una urgencia para Quilmes, y la visita a Villa aparecía como una alternativa motivadora que terminó dándole la alegría perseguida durante todo el torneo.
Esa victoria por 4 a 3 llegó después de estar 2-0 y 3-1 arriba, pero recién se concretó a los 36’ del complemento estando 3-3, con uno menos, y con un golazo de derecha de Franco Fernández, un zurdo cien por ciento. “Por suerte sirvió para sumar, eran 3 puntos que nos teníamos que llevar por la lucha de abajo entre los dos; gracias a Dios se dio en ese momento, así que muy contento de haber podido sumar de a tres” destacó Franco.
En el primer tiempo Quilmes estuvo más ordenado, fue más ambicioso y preciso. “Sí, tuvimos unos 15-20 minutos donde lo manejamos bien; después nos desacomodamos un poco producto de la necesidad del rival que salió a buscarlo, pero terminamos con la victoria que era lo que vinimos a buscar”.
Para los segundos 45’, estando 2-0 arriba, Quilmes sabía que debía aguatar los embates de un rival que iría por todo, y si bien quedó 3-3 y con uno menos, el Cervecero terminó ganando. “Algo que nos caracteriza con nuestro escudo es nunca bajar los brazos e ir siempre para adelante, así tengamos uno o dos menos; siempre vamos a ir para adelante. Aguantamos la reacción de Villa, la asimilamos y terminamos ganando; fueron muchos días en los que salimos frustrados de una cancha, pero de apoco vamos a ir sumando fuerte y a cambiar la cara”, valoró el mediocampista.
La llegada de Omar Espinal, el empate del primer juego y este triunfo genera otra atmósfera en el ambiente quilmeño. “Cambiamos el aire, nos metimos en la cabeza lo que quiere el técnico nuevo y por ahí las cosas están saliendo un poquito más”.
Fernández ha sido un gran estratega como basquetbolista, y como deportista sabe que la mejor expresión para un plantel es dar todo lo que puede. “Estamos empezando a entender lo que nos pide el técnico y llevarlo a la cancha, que por ahí eso es lo más difícil; y en cuanto al grupo, este equipo está decidido a no negociar nunca la actitud, y más allá de que no salga, seguir metiendo, seguir buscando y jugar siempre lo más ordenados posibles”, analizó.
En la despedida, y desando que el campeonato les muestre un mejor horizonte, Fernández recordó “a un chico muy cercano al club que sufrió un accidente y está internado en Bahía; este partido y la victoria son para él”, confesó el héroe de la recordada victoria del Cervecero.