03|06|23 13:23 hs.
Hoy ya no ríes
mujer golpeada, mujer guerrera
mujer preciada, mujer sin paz.
El tiempo duele, perturba, somete.
El tiempo es el dueño de tu libertad.
Abre la jaula, los años no vuelven
y el miedo se esfuma entre tanta piedad.
Quítate el miedo, la raíz del apego.
Sácale la máscara a tu cruel realidad.
Estira tus manos, hay brazos que esperan
Hay vida ahí afuera sin hastío ni crueldad.
Perdona al pasado, no es tiempo dorado
Lo sano no pega, no grita, no hiela
Lo sano está lejos de tanta maldad.
Que el pozo de tu alma no opaque tus ganas
Tu fuerza, tu honor o tu dignidad.
No vale la pena tu propia condena, el castigo aceptado o la soledad.
Prometo que afuera, el dolor se achicharra
el miedo se achica y el temor ya no asfixia.
No dudes de ti ni de tu voluntad.
El infierno es pasado, el futuro ya ha llegado y tu tiempo es ahora: elige la paz.
Te abrazo, mujer golpeada,
Te sostengo firme con la mirada
Te tengo la mano para que puedas saltar.
Te espero, te acompaño
Te acobijo en mi regazo
Los monstruos no existen de este lado de la verdad.
(*) La autora es tresarroyense, licenciada en Comunicación Social y locutora nacional