20|12|22 18:06 hs.
Colegiales llegó a esta final con la ilusión intacta y el deseo de aprovechar la localía para dar el primer impacto en el juego que abrió la serie definitoria ante Huracán; pero el resultado le dio la espalda, y si bien su desempeño no fue el esperado, para la revancha mantiene la cuota de optimismo de cualquier buen competidor.
“No siempre se tiene un buen partido y no todas las chicas están al cien por ciento; pero bueno, tenemos una oportunidad más, por lo que nada está perdido”, confesó Karen Iñigo de forma autocritica y esperanzadora a la vez.
La rendidora jugadora del Escolar tiene razón en mantener viva la ilusión. “Esta sólo es la primera parte; dimos todo lo que pudimos algunas jugadoras, ya que otras se sintieron afectadas por el intenso calor, que perjudicó físicamente a algunas. Todavía falta la revancha, y a cada partido hay que jugarlo, no?”, dijo potenciando sus posibilidades.
Iñigo aceptó que Huracán dominó el juego y que haber anotado en el inicio del partido caló profundo en el ánimo de Colegiales. “Siempre nos hacen un gol de movida y es como que a alguna jugadora eso la termina descolocando; pero hay que remarla, meter más que nunca”, confesó.
Colegiales intentó dentro de sus posibilidades cambiar el desarrollo del juego en esta primera final, pero chocó con una superioridad de Huracán que selló fuertemente el 6-0. “Es cierto eso, sabemos que ellas tienen jugadoras con un buen pie y debemos controlarlas; pero si nos desesperamos en el momento de los goles que recibimos ya no podemos recuperar ese control. Esto nos pasó hoy después del tercer o cuarto gol, porque desde allí al final del partido ya no tuvimos control de nada”, entendió Iñigo.
Colegiales hizo un buen año, esa es una realidad absoluta; como también lo es que ese potenciar propio del equipo puede permitirle una reacción en la revancha. A la diferencia de seis goles deben borrarlas, ya que el viernes sólo con ganar forzará a un tercer juego. “Arrancamos de vuelta; tenemos revancha, es una nueva oportunidad. Estamos tranquilas de todas maneras porque no damos por perdida esta final, falta mucho por jugar todavía. Nos aferraremos a eso, más que nada por la gente que viene a vernos y por el sacrificio que hacemos durante todo el año”, valoró Iñigo.