Policiales

Tres años después, el femicidio sigue sin condena

Fabiana presente, ahora y siempre

15|10|21 09:38 hs.


La tristeza e impotencia se lee en los ojos de cada uno de los que se reunieron ayer y marcharon para pedir justicia por Fabiana Suita. A pesar de que las condiciones climáticas no acompañaron y la lluvia empapó las vestimentas de todos, alrededor de cuarenta personas se acercaron a la plaza San Martín para darse un abrazo colectivo y fuerzas para seguir luchando por la condena del femicida. 

Al grito de “Fabiana presente, ahora y siempre”, y acompañados por la Colectiva Feminista Ni Una Menos Tres Arroyos, familiares, amigos, allegados o simplemente personas que empatizan con la causa, se dirigieron en primer lugar hacia calle Colón para luego pedir “justicia por Fabiana” en frente a la Comisaría de la Mujer y la Familia. 

Siguiendo la marcha, Mariana Moro, quien fue una gran amiga de Fabiana y además convocó a este encuentro, tomó la posta del megáfono: “Hoy Javier San Román está sin condena. No tuvo juicio, que todos lo sepan. Por mi amiga y cuántas más, no pueden ignorar esto. Es horrible lo que vivimos. La aisló y la ocultó de nosotras que somos sus amigas y sus hermanas. No es inimputable porque sabía bien lo que estaba haciendo y en cuestión de meses terminó con su vida. No lo hizo una vez, lo hizo incontables veces hasta que mi amiga murió desangrada. Tres años pasaron, ¿qué están haciendo?”, denunció, con intensa aflicción. 

Durante el recorrido también los manifestantes pegaron carteles de “justicia por Fabiana” y “Javier San Román femicida” en las calles y paredes de la ciudad. 

Tres años 
Ayer se cumplieron tres años de aquel trágico día en el que Fabiana Suita, la tresarroyense de 30 años, fuera asesinada por quien era su pareja, Javier San Román. Unas horas después, el femicida confesó el crimen en la Comisaría Primera de nuestra ciudad, expresando la frase "me mandé una macana", que todavía resuena con mucha rabia en los oídos de quienes fueron cercanos a ella. 

La causa hoy en día se encuentra estancada debido a los intentos de la defensa de San Román para declararlo como inimputable. Aunque luego de diferentes pericias finalmente se determinó que el femicida está en condiciones de afrontar un juicio, por lo que la causa será elevada a esa instancia, que comenzaría el año que viene. “Pasaron tres años y estamos como el primer día, cuando él se entregó”, contaron allegados de la víctima anteriormente a La Voz del Pueblo. 

Fabiana era madre, era hija, era amiga, era vecina. Hoy es una menos, otra víctima más de la violencia de género. Que este crimen no quede impune es obligación de la justicia, para que el femicida pague la condena por lo que hizo.